Era importante diseñar una casa sin destruir el magnífico paisaje del Duero, patrimonio mundial. Concebimos una casa completamente integrada en la pendiente cultivada existente. Todas las estancias tienen sus vistas dirigidas al río excepto la cocina y el recibidor que conectan con dos patios. El tejado está cubierto de hierba, lo que hace que la casa sea casi invisible. En la región del Duero, patrimonio mundial por la UNESCO, todo sigue igual… bueno.
Casa de campo sostenible en el Duero
Imágenes
La importancia de los materiales en la construcción ecológica
Diseñamos esta casa intentando utilizar materiales tradicionales de la región del Duero. Por eso favorecemos el esquisto y la tierra. En este sentido, todo el exterior cuenta únicamente con estos dos materiales. Esto supone un enorme ahorro de CO2, ya que todo el material utilizado se encontraba en obra. Tallamos la casa en la roca y la roca misma nos proporcionó las paredes. La tierra que desplazamos es precisamente la tierra que utilizamos para la cobertura.
La inercia térmica en la casa ecológica.
En verano, el Duero tiene temperaturas muy altas durante el día y un fuerte enfriamiento por la noche. En invierno, la temperatura del aire desciende a temperaturas cercanas a cero, pero no así en las profundidades del subsuelo. Esto significa que existe la posibilidad de aprovechar la inercia térmica para climatizar pasivamente la casa. Eso es lo que hemos hecho en esta casa. La casa está excavada en el suelo precisamente para aprovechar esta energía gratuita en invierno y verano.